Por: Ney S. Collins
La Naturaleza es un dón del amor Dios, es un reflejo de su caracter, es un
regalo especial para el hombre. No tenemos autoridad sobre ella para; dañarla,
maltratarla, ensuciarla, etc. Pero si tenemos el deber de; cuidarla, amarla, limpiarla
protegerla, y todo lo que sea bueno para ella.
Seguro estoy de que Dios ve con tristeza todo lo malo que hacemos entorno a la
naturaleza.
Es momento de reflexionar, hacer un alto y proponer una terapia inicial para cambiar
esta idea negativa hacia la naturaleza.
Creo que en cuanto tengamos la primera oportunidad, en lo inmediato deberiamos
visitar el bosque, monte, playa, rio, arroyo más cercano a nuestro habitat y contemplar
todo su hermosura y con un interés claro de hacer cambiar las cosas, decirle a tus amigos,
compañeros, vecinos, hermanos que es tiempo de.....
Proteger La Naturaleza........!
limpiemos la ciudad, los bosques, los rios, las playas, montes, praderas, parques y seremos del agrado de Dios.
Gracias....